Share:

Categories:

5 min read

Experiencia inmersiva: qué es y cómo hacer único el contacto con las marcas

En una época en que la atención del cliente vale más que el oro, ofrecer experiencias inmersivas que sean realmente encantadoras y diferentes otorga a su marca el título de «única». Y créame: este es el gran diferenciador.


Vivimos en un mundo hiperconectado. Desde los videojuegos hasta las redes sociales, todo es ahora omnicanal, integrado y en línea las 24 horas del día. Y cada vez vivimos más una experiencia de inmersión en lo digital.

Lo mismo ha ocurrido en el mundo empresarial con los consumidores. Hoy en día, no hay posibilidad de no deleitar a sus clientes con experiencias innovadoras.

La realidad es que muchos productos, servicios y marcas son más de lo mismo. La calidad, la durabilidad, el servicio y todos los demás atributos no son un gran diferenciador entre los competidores.

Lo que define quién es el ganador de esta carrera es quién llega al corazón del cliente… ¡y al bolsillo, por supuesto! – del cliente primero. Parece fácil, pero no lo es. Siga la pista para entender mejor cómo funciona la experiencia inmersiva y lo que puede transformar.

¿Qué es la Experiencia Inmersiva?

En una época en la que la experiencia del usuario es cada vez más importante, la creación de formas de comunicación con su público es fundamental. No se trata sólo de la calidad que compone la cartera de productos de su empresa, sino de atraer, comprometer y conquistar a su público.

La experiencia inmersiva, como su nombre indica, pretende proporcionar al cliente una inmersión real, una experiencia práctica en su producto o servicio. 

Además, lo ideal es que esta acción se base en el disfrute a través de los cinco sentidos, transformando una simple degustación en un entorno nuevo, original e ilusorio que provoque buenas sensaciones.

La idea principal de este tipo de estrategia es conectar al usuario con el producto de una manera tan encantadora y única que sienta la necesidad de ser fiel a su marca, ya que ningún competidor ofrece nada parecido.

Es importante destacar que no es una tarea sencilla de realizar. La buena noticia es que hay muchas maneras de aprovechar las experiencias inmersivas en su planificación estratégica. Obviamente, la tecnología los atraviesa a todos.

¿Cuáles son los pilares tecnológicos de la Experiencia Inmersiva?

Decir que la transformación digital ha cambiado las reglas del juego en todos y cada uno de los sectores ya es más de lo mismo. Lo cierto es que no hay vuelta atrás: cada vez más, la tarea de deleitar a los clientes estará directa e intrínsecamente ligada a la tecnología.

La experiencia de inmersión no es diferente. Créame: este concepto sigue la máxima de que no hay inmersión en ausencia del factor tecnológico. Uno de los pilares tecnológicos más importantes es la Inteligencia Artificial y sus tecnologías y herramientas. 

Ahora es fácil, ¿verdad? Pero, ¿cómo ofrecer una experiencia que pretenda transportar al cliente a un nivel ampliado e inmersivo?

Y más, que aporta nuevas sensaciones, interacciones y estímulos precisamente sensoriales, siempre alineados con su necesidad y/o satisfacción? 

Los que han respondido a una de estas preguntas han acertado: 

Realidad Aumentada (AR)

Realidad virtual 

Proyección

Y a partir de estos elementos ya debería haberse dado cuenta de que la experiencia está diseñada para llevar al consumidor a un nivel de inmersión ampliado, aportando nuevas sensaciones, interacciones y estimulación sensorial. 

Sí, es un poco (o un mucho) Black Mirror en realidad.

Hablaremos más de los cuatro puntos aquí arriba, ya contando cómo funciona la experiencia. Compruébalo.

¿Cómo funciona esta Experiencia?

Realidad virtual – VR

Con el apoyo de las gafas características de este tipo de tecnología, el usuario empieza a ver otra realidad. Tanto las imágenes como el audio son de una realidad paralela. 

En este tipo de experiencia, cuando el usuario se pone las gafas, se desconecta de su realidad, es decir, deja de ver el mundo exterior y sólo puede ver lo que se muestra «dentro de las gafas».

Estamos muy familiarizados con la realidad virtual. En la película Player No. 1, por ejemplo, se muestran ambas realidades todo el tiempo, y lo que ocurre en una repercute en la otra. 

Que es más o menos lo que ocurre aquí: ¿qué tal si le enseñas a tu cliente el diseño final de su piso renovado para que se sienta como en casa? 

¿O llevarles a visitar la fábrica de su producto y mostrarles lo ecológico que es su proceso? 

→ También te puede interesar: Realidad virtual: pasado, presente y futuro

Realidad Aumentada (AR)

En este caso, la experiencia inmersiva utiliza el propio entorno en el que se encuentra el usuario para crear otra realidad, insertando elementos para crear una experiencia visual diferente.  

La realidad aumentada es muy común porque es una tecnología súper accesible: sólo necesita la cámara de un smartphone, que es algo que todo el mundo tiene. 

En otras palabras, el uso de una experiencia inmersiva con realidad aumentada garantiza que su cliente no tendrá un obstáculo -como, por ejemplo, unas gafas de realidad virtual- para acceder a su campaña. 

Este tipo de iniciativa se ve a menudo en los filtros de las redes sociales, especialmente en Instagram. 

Es habitual ver, por ejemplo, que las marcas de productos de belleza utilizan filtros que muestran cómo quedará el cliente con los colores de sus barras de labios o los distintos tonos de sus tintes para el pelo.

Además, podemos utilizar el ejemplo que dimos en el punto anterior: la decoración del hogar. Con la realidad aumentada puedes aplicar un color de pintura en tu pared o colocar un mueble y ver si te gusta el resultado antes de consolidar la compra. 

Proyección

No es exactamente algo nuevo, pero caracteriza una experiencia de inmersión. Son aquellas acciones que proyectan películas en las fachadas de los edificios. 

Este tipo de experiencia suele depender de la interacción del público, que debe realizar alguna acción para interactuar con la película y provocar una reacción, como, por ejemplo, pedalear para que la película siga proyectándose.

Además de los colores vibrantes, los sonidos y las luces, a menudo, para ser más impactantes, las proyecciones utilizan la tecnología 3D, que atrae la atención del cliente por la realidad de las imágenes. 

Esta estrategia, aunque no es nueva, caracteriza una acción única, que se comparte con muchas personas al mismo tiempo. Puede ser un complemento de otra experiencia inmersiva, casada con la Realidad Virtual o la Realidad Aumentada.

¿Cuáles son las ventajas de ofrecer este tipo de experiencia?

La experiencia inmersiva saca al usuario de su zona de confort, lo sitúa en un lugar al que no está acostumbrado y le presenta otra realidad, generalmente inusual. 

Esta ruptura con la realidad llama la atención al principio. Además, ofrece a los participantes otra perspectiva de su servicio, producto o incluso de su marca en su conjunto. 

Nota: no estamos recomendando que se olviden o abandonen todas las demás estrategias. La experiencia inmersiva es, sí, una forma innovadora de deleitar a su cliente, pero también es un complemento de los enfoques tradicionales. 

Nada funciona por separado, de forma aislada. Dentro de una estrategia, todo tiene que estar conectado, integrado, como decíamos al principio.

En un mundo hiperconectado, no tiene sentido que las iniciativas de una empresa vayan aisladas unas de otras. 

En este sentido, si quiere iniciar su camino hacia la provisión de una experiencia inmersiva para su cliente, he aquí dos puntos de partida:

  1. Piense siempre en asegurarse de que su cliente entre en contacto con algo nuevo e inusual. El «más de lo mismo» no impresiona y puede decepcionar al usuario. 
  2. Piense en su marca y en su empresa no sólo como un proveedor de experiencias increíbles. Si se hacen bien, crean una conexión leal con su público.

Para un estudio más profundo de la Experiencia del Consumidor, recomendamos la lectura del Ebook CX: Guía Completa. El cliente en primer lugar. Con las nuevas técnicas y estrategias disponibles, ¿Dónde encajan la experiencia del cliente (CX), el servicio al cliente y la gestión de la experiencia del cliente (CEM)?

Descúbralo a través de nuestro ebook y adelántese a la competencia. 

Back